Hotel Hércules: historia, diseño y descanso en una ex fábrica textil en Querétaro

Entrada del Hotel Hércules con fachada de ladrillo original y árboles.
Blog / Hotel Hércules: historia, diseño y descanso en una ex fábrica textil en Querétaro

Una fábrica del siglo XIX convertida en refugio de diseño.

Dormir en una ex fábrica textil del siglo XIX suena a plan improbable, hasta que llegas a Hotel Hércules. Este hotel boutique, ubicado en el corazón de Querétaro, logra algo poco común: conservar la fuerza de su pasado industrial y convertirla en una experiencia de descanso íntima, estética y bien diseñada.

Con 40 habitaciones cuidadosamente intervenidas, el hotel se alza sobre los cimientos de la antigua Fábrica Textil El Hércules, un espacio que encontró en la hospitalidad su nueva vocación.

La arquitectura original convive con materiales nobles, textiles artesanales y detalles de diseño que hablan del presente sin borrar el pasado. El resultado es un lugar donde se respira historia, pero también tranquilidad.

Interiores con carácter

Los interiores, diseñados por GOMA y El Urdido, encuentran el equilibrio entre lo crudo y lo cálido. Cada habitación es distinta, pero todas comparten una misma filosofía: ofrecer confort sin excesos, belleza sin pretensión.

Caralarga, el taller textil que opera en la misma fábrica, aporta una identidad visual con piezas hechas a mano que habitan muros, lámparas y textiles.

Una historia con raíces profundas

La historia del lugar es tan rica como su presente. En 1846, el empresario español Cayetano Rubio fundó la Fábrica Textil El Hércules sobre los restos del antiguo Molino Colorado. De ahí nació un barrio obrero con identidad propia. Más de un siglo después, y con la fábrica aún activa a menor escala, la cervecería abrió en 2011 para revivir la grandeza del sitio.

Hoy, sigue siendo el corazón cultural y social de la comunidad.

Pero, más allá de sus habitaciones, el hotel ofrece espacios comunes pensados para bajar el ritmo: terrazas, patios, una alberca rodeada de vegetación, salones amplios y silenciosos.

Todo invita a quedarse, a desconectarse, a simplemente estar.

El entorno acompaña claro, pero la cerveza, el spa, el restaurante y los jardines le dan al huésped opciones para complementar la experiencia, aunque el alma del lugar está en el hotel mismo: en sus muros gruesos, en la luz que entra entre estructuras de concreto, y en la forma en que el pasado y el presente dialogan.

Un spa que respira calma

Dentro del hotel, el spa es un antiguo espacio de manufactura industrial transformado en un santuario de relajación.

Ahí, el bienestar fluye entre terapias de agua, vegetación endémica y diseño silencioso. Cuenta con hidroterapia (piscinas de hidromasaje y contrastes térmicos), sauna, vapor y una terraza para tomar el sol en calma.

Y para quienes no se hospedan en el hotel, también está disponible en formato day pass, ideal para desconectarse por unas horas y sumergirse en esta experiencia de tranquilidad.

Cocina local, maridaje perfecto

La propuesta gastronómica también es parte esencial de la experiencia.

En Comedor, el restaurante principal, se sirven platillos regionales y clásicos reinventados, pensados para maridar con cerveza en un ambiente cálido y sin pretensiones. Está abierto tanto a huéspedes como al público general (con reservación previa).

A un costado de la alberca, Buenavista ofrece una carta ligera con mariscos frescos provenientes de productores nacionales, ideal para una comida bajo el sol. 

Y para quienes buscan una experiencia más informal, Taverna Hércules —ubicada dentro del complejo de la fábrica— sirve snacks y platillos sencillos que acompañan perfecto una cerveza recién tirada, en un ambiente relajado, entre tanques y mesas comunales.

Un ecosistema creativo que se habita

Quedarse en Hotel Hércules es sumergirse en un ecosistema creativo y vibrante que trasciende la hospitalidad.

Dentro del mismo complejo conviven la cervecería, un beer garden, salones para eventos, talleres textiles, estudios de arte, arquitectura y fotografía, además de pequeñas tiendas de productores locales. Más que un hotel, es un universo que se explora paso a paso, con calma, como se disfrutan las cosas que tienen historia y alma.

Hotel Hércules, es una invitación a bajar el ritmo

A tan solo tres horas de la CDMX, este recinto es mucho más que un buen lugar para dormir. Es un proyecto que honra su historia, que apuesta por el diseño local y que convierte el descanso en algo con peso, textura y memoria.

¿Te quieres escapar?
🏨 Reserva en hotelhercules.com 

Related Posts

Previous
Next